En promedio, a partir de los 45 años, suelen aparecer los problemas hormonales y la menopausia. Es un momento particular en la vida de las mujeres y uno de los órganos en el que se evidencia el impacto es la piel. Durante esta etapa comienza a notarse la pérdida de luminosidad y firmeza de la piel
Las isoflavonas de soja, especialmente la genisteína, ejercen acciones beneficiosas en contrarrestar el envejecimiento de la piel ocurrido durante la menopausia.
El ácido hialurónico actúa como hidratante de la piel, aumentando su volumen y densidad, minimizando así las arrugas y el envejecimiento de la misma.
La vitamina C actúa como antioxidante y agente de protección frente a los radicales libres. También tiene efecto despigmentante, dejando la piel más clara y luminosa.
CONTRIBUYEN A COMBATIR LOS SIGNOS DE ENVEJECIMIENTO CUTÁNEO: ARRUGAS, PÉRDIDA DE FIRMEZA, ELASTICIDAD, FLEXIBILIDAD Y VITALIDAd
